En la vida real el fuego tiene los siguientes efectos:
El fuego se propaga en los materiales combustibles.
El fuego, aplicado a una herida, la cauteriza y corta de forma abrupta la hemorragia, pero las quemaduras causadas provocan un gran dolor, debilidad y mayor riesgo de infección.
Las quemaduras son dolorosas y, de ser graves, pueden debilitar notablemente a la víctima.
En este juego de rol el fuego también puede propagarse sobre materiales. Si bien los efectos sobre el entorno son narrativos y las consecuencias son arbitrarias (dependen más del máster que de una normativa estricta).
En el caso de actuar sobre personajes y enemigos, el fuego puede causar enormes daños.
Para mi universo distingo dos posibles consecuencias del fuego: el daño tipo fuego y el efecto de estado cremación.
Daño tipo fuego:
Aquellos ataques o interacciones relacionados con el fuego, o con materiales incandescentes, que no propaguen dicho fuego, provocarán daño tipo fuego.
El daño tipo fuego es sencillamente un tipo de daño distinto al daño físico (es decir, diferente al daño proveniente de golpes, ataques con armas blancas y proyectiles), para cuya protección en específico se precisa del empleo de trajes, subtrajes y armaduras especiales.
El daño tipo fuego suele ir acompañado con estrés y pequeñas mermas efímeras relacionadas con la fuerza, la precisión y la evasión.
En caso de obtener grandes cantidades de daño de tipo fuego, las mermas pueden volverse más grandes y duraderas, afectando también a la velocidad y la resistencia a la infección y el veneno, o incluso puede producir aturdimientos de tipo inconsciencia.
Ocasionalmente, los ataques de tipo fuego recibidos podrían cerrar las hemorragias de la víctima (es decir, eliminar el efecto de estado negativo "sangrado", si lo tiene).
Efecto de estado cremación/incineración/ardiendo:
Aquellos ataques que propaguen fuego sobre su víctima (ya sea rociándole con alguna substancia combustible, o prendiendo sus ropas o carne) producirán un efecto de estado junto al daño tipo fuego inicial.
El efecto de estado, cuyo nombre todavía no está del todo decidido (lo más probable es que se llame "cremación" o directamente "ardiendo"), sería del tipo daño/ronda.
Es decir, el personaje o enemigo afectado obtendrá "x" puntos de daño tipo fuego en cada ronda (cada turno) durante "n" rondas o antes si el fuego es apagado.
Este efecto de estado puede ser fatal si la victima no posee la protección adecuada.
El daño suele ser elevado, y las mermas y el estrés que causa también. Es muy probable que la víctima sufra de aturdimiento mientras arde ya que no podrá atacar ni pensar a causa del dolor.
Nuevamente, las hemorragias se cerrarán bajo la acción del fuego, pero este efecto de estado causa enormes daños. Tras finalizar el quemado, la víctima sufrirá mermas en su resistencia a la infección y al envenenamiento que durarán hasta el final de la misión sin poder ser curadas.